El encargo consistía en convertir tres salas contiguas en una sola para que se pudiera utilizar en eventos de reuniones de oficina o bodas, manteniendo la opción de utilizarlas por separado. Las particiones fijas que separaban la sala central de las adyacentes fueron reemplazadas por unas móviles, permitieran su movimiento dependiendo del tipo de evento a realizar.
La apariencia de las salas debía de ser sencilla y que su diseño no distrajera a los usuarios del evento que tendrá lugar. El objetivo era diseñar un contenedor que los usuarios de los eventos, bien empresas o novios pudieran decorar de acuerdo a sus necesidades, implementando las salas con su marca, actividades o exhibiciones.
Los acabados propuestos son similares a los de una oficina, pero con un toque más moderno y casual. Se diseñaron espejos serigrafiados en las paredes transversales y móviles para jugar con el efecto de continuidad y reflejar las vistas del Mediterráneo que se pueden encontrar a lo largo de la fachada. Las costillas de luz se repiten transversalmente abrazando a los usuarios de los espacios, al tiempo que se proyectaron luces que cambiaran de color según las necesidades del evento a realizar. Los difusores de aire lineales, tanto para suministro como para retorno, fueron integrados dentro de las costillas para mantener el ritmo del espacio, creando una apariencia limpia y enfatizando la linealidad de la propuesta. Los altavoces, detectores de incendios y luces descendentes se encuentran dentro del área del techo acústico. La propuesta también incluyó una selección de mobiliario que acompañase a la propuesta de oficina.
